La historia de cómo un proyecto de clase transformó a Evan Spiegel en uno de los jóvenes más ricos del mundo.
Por: David Fleitman
Seguramente ya conoces Snapchat, pero no sabes la historia detrás de la app que permite enviar fotos y videos con textos y dibujos con un tiempo determinado de vida.
Evan Spiegel, de 27 años, es un emprendedor americano; cofundador y CEO de Snap Inc., quien a los 25 años decidió crear Snapchat mientras era estudiante de la Universidad de Stanford… y hoy uno de los jóvenes más ricos del planeta.
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Picaboo fue el primer nombre que tuvo la aplicación cuando Spiegel decidió darle vida a este proyecto en el año 2011 como entrega final para una de sus clases en la universidad.
Aunque al principio la idea fue reprobada por sus compañeros, a quienes no les pareció que las imágenes desaparecieran, en mayo del año siguiente se mandaban 25 fotos por segundo y para finales de ese año ya se compartían un millón de imágenes.
Una de las funciones de Snapchat son los filtros… desde cachetes abultados hasta narices prominentes es lo que esta app ofrece (Foto: Especial)
A finales de 2013, la aplicación llegó a tener un intercambio de imágenes de 14 mil millones al día, por lo que la empresa alcanzó un valor de 10 mil millones de dólares.
Un año después, Snapchat fue la aplicación con el crecimiento más rápido en todo el mundo y se convirtió, junto con Facebook, WhatsApp, Twitter e Instagram, en una de las aplicaciones más utilizadas en el planeta.
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Spiegel, el millenial promesa
Evan Spiegel es la imagen del triunfador de internet: joven, con estilo y un instinto desafiante para los negocios, lo que lo hace destacar en Silicon Valley, en donde las nuevas promesas no dejan de despegar.
La función de que las imágenes tuvieran 24 horas de vida no convenció a los compañeros de Spiegel; sin embargo, pensándolo bien… no está tan mal que nuestras peores fotos desaparezcan. (Foto: Especial)
Tan listo como decisivo, Spiegel rechazó la oferta de Facebook para comprar Snapchat por tres mil millones de dólares, al confiar en el futuro que tendría su creación. Él vio lo que muchos no pudieron: una generación de millenials que vive más rápido que ninguna otra, en donde las palabras son historia y las imágenes se han convertido en el principal medio de comunicación.
“las palabras son historia y las imágenes se han convertido en el principal medio de comunicación”
Como todas las empresas de este tipo, el gran reto para Spiegel era lograr que los ingresos reflejaran el valor de la empresa. Hace dos años, Snapchat tenía utilidades tan solo del 1 por ciento del valor de la compañía, lo que en su momento causó incertidumbre; sin embargo, los usuarios aumentaron lo que ocasionó que el mismo fondo que en una ocasión le dio la espalda, inyectara millones de dólares para que Snapchat continuara con su crecimiento.
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Snapchat, esa app que nos hace sacar nuestro lado artístico tiene un gran reto: dar batalla a su máximo competidor: Instagram Stories (Foto: Especial)
Pese a que la sostenibilidad de Snapchat es una pregunta frecuente para los inversionistas, su fundador confía en el proyecto. Con Instagram Stories, Spiegel tiene un reto aún más grande: dar batalla a quien se posiciona como su más grande competidor.
No queda más que esperar con qué nos sorprenderá este visionario de la tecnología.