Pasan los años y la chamarra de piel sigue vigente. La cazadora se ha convertido en un clásico que sabe permanecer sin perder el toque chic.
Por: C
La chamarra de piel no pasa de moda. Esta prenda es un elemento must en el clóset de todo hombre, que al igual que los jeans, pasa de generación en generación.
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No importa si es un evento de gala o una noche de antro, la chamarra de piel es camaleónica: se lleva bien y combina con todo.
Un must a través de la historia
La primera chamarra de piel se la debemos a Irving y Jack Scott, quienes la crearon en 1928. Desde el primer modelo se incluyeron elementos característicos que ahora son infaltables, como la cremallera de costado, las solapas o los bolsillos. Fue confeccionada en piel, ya que este tipo de textil no bloquea el aire. Además, las fibras nylon y poliéster todavía no se inventaban para esa época.
Para los años 50, la chamarra de piel se convirtió en una prenda básica para los jóvenes rebeldes, probablemente gracias al cine, por películas protagonizadas por Marlon Brando o James Dean, que hicieron parte de su outfit, las chamarras, los jeans y las playeras blancas.
Estilos de chamarra
Biker: No importa si manejas una moto o no, este tipo de chamarra será tu compañera ideal para salir a rockear. Es perfecta para la temporada de frío y calor.
Beisbolera: La beisbolera en su versión cotidiana le da a tu atuendo una actitud sport chic; sin embargo, si la usas en piel, el look será digno de un seductor nato. ¡Combinala con tu playera favorita!
Cazadora: La versión clásica de la chaqueta de piel. Lisa, sin adornos y en corte recto. Nunca falla. 😉